Zidane: «Conmigo, el que no esté a tope no juega, se llame como se llame»

«Conmigo, el que no esté a tope, no juega». Con esta frase tan contundente y tan directa se ha expresado Zinedine Zidane ante la Junta Directiva del Real Madrid al conocer de forma oficial su elección como relevo de Rafa Benítez en el banquillo del primer equipo blanco.

Para Zizou, la meritocracia es algo innegociable. Durante su etapa como entrenador del Castilla, el técnico francés ya ha demostrado sobradamente que con él no juegan los nombres, sino los futbolistas que están más en forma y los que mejor trabajan en los entrenamientos.

Quizá el caso más palmario es el de Martin Odegaard, el joven crack noruego al que el Real Madrid fichó mediada la temporada pasada. A Zidane no le ha temblado el pulso en dejarle en el banquillo cuando el jugador no se ha entrenado a tope o cuando ha tenido más entrenamientos con el primer equipo que con el filial.

Zidane, educado como futbolista en la exigente escuela del fútbol italiano, tiene muy claro que los jugadores se ganan la titularidad con el trabajo en los entrenamientos y no por el precio que el club pagó por ellos o porque sean más atractivos para la grada o para la prensa.

Zizou ha sido muy claro al asegurar a Florentino Pérez y a sus directivos que no titubeará ni un instante si tiene que dejar en el banquillo a alguno de los pesos pesados de la plantilla y que ninguno de los cracks del Real Madrid tiene el puesto asegurado sólo por su nombre, su fama o sus logros anteriores. «Se juega como se entrena», dice siempre Zidane haciendo suya una frase de Fabio Capello. Por eso el técnico francés tiene muy claro que los jugadores que se ganen cada semana la titularidad, serán siempre los once elegidos.

La declaración de intenciones de Zizou llega en un momento donde tendrá que afrontar desde el primer día alguno de los frentes abiertos que dejó Rafa Benítez en su plantilla. Recomponer la relación con el vestuario será una de las prioridades de Zidane para enderezar cuanto antes el rumbo de la nave del Real Madrid, cuyo timón está dispuesto a coger con brazo firme.